sábado, 26 de mayo de 2007

ASAJA Extremdura reclama a la Junta que inicie los trámites para que se declare al Valle del Jerte zona catastrófica

Se pide esta declaración debido a las pérdidas que las últimas lluvias han causado en la cosecha de cereza de esta temporada e instó también al Consejo de Ministros que aprueben ayudas para paliar la situación que han vivido los cereceros.

El presidente de Asaja Extremadura, Ángel García Blanco, ha recalcado que las pérdidas económicas del sector en las zonas del Valle del Jerte, Villuercas-Ibores y las Hurdes podrían alcanzar los 21 millones de euros ya que han "desaparecido" alrededor de 9 millones de kilos de cerezas.

Junto con ello, ha reclamado otra serie de medidas "de inmediato" como la exención del pago de IBI a todos los agricultores, además de la condonación de las cuotas de la seguridad social durante un año, que se exima a los agricultores afectados del pago del IRPF y que se otorgue una subvención a fondo perdido de 6.000 euros por agricultor profesional.

Asimismo, la organización considera necesarias otras medidas a medio plazo como que se destine una partida de 8 millones de euros para restablecer el patrimonio rural afectado ya que "han desaparecido miles de bancales y se han destrozado miles de infraestructuras".
Según García, otra de las medidas necesarias es la creación de un seguro agrario eficaz que garantice las rentas pues, el actual "no cubre los daños por lluvia, cuando éste es el verdadero riesgo de las cerezas", añadiendo que "algo falla cuando sólo 40 de casi 4.000 agricultores han contratado la póliza" y, "el seguro actual es un atraco".

Para la organización, estas medidas han de ser de aplicación a los agricultores tanto del Valle del Jerte como de la Vera, la zona de Hurdes y la de Villuercas-Ibores, "que también han sido gravemente afectados".
Sobre las pérdidas que se han sufrido dependiendo de la variedad de cereza, García ha matizado que 95% de la variedad Burlat, una cereza temprana implantada fundamentalmente en el sur del valle, "está rajada como consecuencia de las fuertes lluvias".
Por otra parte, las lluvias han afectado también al 75% de las variedades Navalinda y California y al 40% de la variedad Ambrunes, la conocida popularmente como "picota" en la zona baja y, casi un 80% de las zonas altas como consecuencia de la "grave granizada que tuvo lugar" el pasado martes.

Ante esta situación, ASAJA ha calificado de verdadero "infierno" lo vivido por los productores de las 12.500 hectáreas de esta zona, lo que la coloca en la más importante de Europa, reiterando su exigencia de ayudas inmediatas para ayudar a los agricultores.
Y, las lluvias han afectado no sólo a los árboles y la cereza en sí, si no al terreno ya que se han destruido bancales y el agua se ha llevado por delante paredes y estructuras que habrá que volver a reconstruir, considerando una "desgracia" la situación vivida y, solicitando la urgente adopción de medidas por parte de las autoridades.

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