La herencia de Gil Cordero
"España en la vereda" viaja al corazón de Extremadura. Escondido entre Villuercas y Altamira se encuentra el Real Monasterio de Santa María de Guadalupe, el alma de toda la provincia.
Nada más entrar en la región nos encontramos con una humilde personificación de parte de ese alma extremeña, en el pueblo de El Gordo concretamente. Este pueblo ha hecho gala siempre de ser uno de los núcleos con más cigueñas de España.
Tanto es esto así que, aunque el refrán dice “por san blas la cigüeña verás” lo cierto es que cada vez son más las cigueñas que ya no vuelven solo por esas fechas, porque ya no va África. Esta especie de aves, cada vez más, permanece en España durante el invierno, principalmente, en zonas templadas o con áreas encharcadas como esta parte de Extremadura.
Cada día las cigüeñas ofrecen un espectáculo maravilloso con sus crotoreos, un festejo de las parejas de esta especie. Se trata de un sonido que emiten con su picos, castañateándolos, que llena de alegría el corazón de los pueblos y se convierten en el alma de estos pueblos.
Estas cigüeñas tienen como punto de encuentro el pantano de Valdecañas, al sur de la región. Allí aprovechan el agua para beber y desde allí contemplan las ruinas romanas de Agustóbriga.
Continuando el camino hacia el sur, el paisaje cambia su rostro. Las comarcas más agestres de las tierra de los conquistadores se abre paso y, subiendo por el río Ibor, se pueden contemplar las laderas de estos montes que cubren de bosques mediterráneos esta parte de la región. Por esta sierra de las Villuercas atravesaban los peregrinos y para ellos se construyó concretamente, el humilladero donde los viandantes podían contemplar la cúpula de Guadalupe, el alma de Extremadura.
Guadalupe, corazón de Extremadura, creció en torno al lugar en donde el pastor Gil Cordero hayó en la Edad Media una imagen de la virgen. En torno a ella, creció una ermita, luego un santuario y finalmente un pueblo en torno al mismo. Es un lugar cargado de historia en donde estuvieron los Reyes Católicos. Un lugar que está muy ligado a la conquista de América y a su evangelización, pues fue aquí donde Cristobal Colón hizo bautizar a los primeros indios traídos de América.
Muchos son los que dicen que Guadalupe constituye el signo de identidad y de unidad de Extremadura . Un centro espiritual que además es también un santuario de la naturaleza. Decía Lope de Vega que la naturaleza, sabedora de que un día la virgen, princesa del cielo, fuese a manifestarse aquí, edificó desde el principio del mundo este palacio montañoso.
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